El Chinchu al Rugby Champang!

Así se lo explico a Scrum en una nota Exclusiva!

BUENOS AIRES -- A mediados de 2010, y luego de desempeñarse por dos temporadas en el rugby italiano (L`Aquila 2009-2010 y Capitolina 2008-2009), Maximiliano Bustos, se vio obligado a regresar a la Argentina por un problema familiar. "Hice las valijas y me volví con la idea de instalarme definitivamente en nuestro país", le cuenta a Scrum, mientras pasea por el centro de Rosario con su familia.

Pero el destino le tenía preparada una mueca cómplice a este pilar santafesino de 25 años. "Todo pasó tan rápido...", dice, sorprendido. Y vaya si tiene razón. Repasemos lo que fueron los últimos meses de este gigante de casi 130 kilos: convocatoria y título en la Vodacom Cup sudafricana; debut en el seleccionado argentino mayor (vs. Barbarians franceses, en Independiente) y, ahora, además de poseer grande chances de ser parte del grupo Puma que viajará a Pensacola, firmó contrato dos años con el Montpellier francés, subcampeón de Francia y minado de jugadores argentinos. "Ya venía hablando con ellos desde hace varias semanas, pero el contrato no terminaba de cerrarse. Pero ahora, por suerte, ya está todo bien y estoy listo para dar mi segunda vuelta por Europa, je. La verdad es que esta oferta me llegó en un muy buen momento", cuenta Chinchu, que es padre de dos hijos: Juan Cruz, de ocho años, y Ulises, de tres. "El mayor es el que más se queja con este cambio. Pobre. Primero, italiano, después español, y ahora francés. Igualmente supongo que va a adaptarse bien", agrega.

-¿Cuándo viajarías para allá?
-Todo depende de Pensacola; estoy muy ansioso...

-¿Y si no se da?
-Si no se da, viajaré en julio para Montpellier y trabajaré el doble para que se me abra otra puerta en el seleccionado.

En el equipo que conduce Fabien Galthie, el forward compartirá plantel con varios argies. Anote. Lucas González Amorosino, Agustín Creevy, Juan Figallo, Santiago Fernández y Martín Bustos Moyano. "Influyó mucho este tema para tomar la decisión final. Además, a los chicos los conozco y son buena gente. Y siempre es lindo estar contenido cuando arrancás con algo nuevo y lejos de tu país. Sinceramente, estoy muy feliz".

Chinchu está contento. Y le sobran motivos para estarlo. Por delante tiene dos grandes desafíos. Primero, intentar seguir aferrado al tren Puma, que tiene a Nueva Zelanda como última estación de su recorrido, y segundo, afianzarse en un equipo francés que está en alza. Que sea con suerte...